Un Escape! O no...
Sigue la lus como todos los buenos vichos de dioz. Así, mojado y todo, logra escapar de las aguas cristalinas que lo rodeaban. Abre puertas y pasillos, rompiendo con todos los paradigmas de su vida, para llegar de vuelta, y darse cuenta de que es el mismo pastrami: carne del transporte público y los puentes. La calle lo saludaba con empatía, pero la gente no; se chocó con un linyera, ya le estaba vieniendo el sueño.
Va casa de su madre.Va a lo del Ogro Salvaje®.
No hay carne, pollo ni pato
Bailo con los ojos cerrados un rato
No está tan malo el conejo en estofado
Un conejo duerme en mi zapato
3 conejos son demasiado. Mejor los regalo.
Atención - Attention
Uy, si tal vez quisiera perderme,
¿podría? ¿Vale la pena intentar?
Porque parecería ser que si quiero no puedo.